Todo emprendedor sabe que sacar adelante una empresa conlleva una gran inversión de tiempo, esfuerzo y dinero. Por ello, es importante que sepas cómo proteger tu negocio para que nada te impida cumplir tus sueños.

En esta nota, Luis Cornejo, gerente de Seguros Corporativos de La Protectora, nos comparte algunos consejos para que cuides bien tu inversión. Antes que nada, debes tener clara la respuesta a las siguientes preguntas.

1. ¿Cuál es el rubro al que me dedico?: Cada rubro tiene requisitos de seguridad distintos. Identifícalos y podrás saber los riesgos hacia los cuales el negocio está expuesto.
   
   
2. ¿Cuántos empleados tengo?: Recuerda que ante cualquier evento, también debes proteger a todos los colaboradores. Ellos son uno de los activos más importantes y debes velar por su salud y bienestar.

3. ¿Tengo vehículos propios o son de terceros?: La protección de los vehículos en tu negocio es sustancial. Estos tienen mayor probabilidad de sufrir un robo o accidente y es un activo del que tienes que estar al pendiente.

4. ¿Hay información valiosa en los dispositivos de mi negocio?: Recuerda que los dispositivos electrónicos son capaces de almacenar todo tipo de información. Debes tener un respaldo de tus datos, así como protección ante contenido personal o financiero.
   
   

5.     ¿Cuánto valen los productos de mi negocio?: Elaborar un documento con todos los activos que tiene tu empresa es indispensable. No solo te ayudará en las ventas cotidianas, sino también en la organización y recuperación financiera tras ocurrir una eventualidad.

Además, Luis Cornejo, te recomienda reforzar tus ventanas, puertas y cerraduras; mantener una buena iluminación; instalar sistemas de detección de fugas de agua y detectores de humo; contar con extintor y retirar el cableado obsoleto o gastado. Si buscas cotizar un seguro, las aseguradoras revisarán el estado actual de tu negocio, por lo que es importante que tomes todos estos aspectos en cuenta.  

Cuando un negocio que no está asegurado sufre algún siniestro, como un incendio o una inundación, el emprendedor debe disponer de mucho dinero para volver a poner el negocio en funcionamiento. Si la pequeña empresa tenía un seguro contra siniestros o multirriesgo, la mayor parte de los gastos será asumida por la aseguradora.

Ocurre lo mismo si un trabajador del negocio se accidenta y requiere un tratamiento costoso. En este caso, un seguro de salud para trabajadores asumiría prácticamente todos los gastos de recuperación, dando tranquilidad financiera al emprendedor.